"Para combatir el antavirus, lo más importante es la higiene. En Yerba Buena hay roedores; eso exige un trabajo conjunto, que involucre a los vecinos y al municipio". Rodolfo Aranda, el director de la oficina de Saneamiento de esa Municipalidad, asegura que se han extremado las medidas de prevención, tras la confirmación de la enfermedad en Tucumán.
"Los negocios en los que se manipulan alimentos pueden atraer ratas. Hace unos días, hicimos unas inspecciones en las avenidas Solano Vera y Aconquija. ¿Sabe que el 30 % de los comercios ubicados allí estaba en situación irregular? Después, nos fuimos a  San José: la cifra llegó al 50 %. Son un montón los locales que no se encuentran registrados. En todo 2014, se libraron 650 actas. Hasta octubre del año pasado, se hicieron casi 700. Desde que asumimos en el gobierno municipal, en cambio, ya hicimos 500 multas", añade el funcionario. 
- ¿Cuál es la política con respecto a los terrenos abandonados?
- Hace poco fuimos a inspeccionar un supermercado. Y vimos que el problema no estaba dentro, sino afuera. Hay muchos sitios baldíos alrededor de ese comercio, por ejemplo. Y las ratas se refugian en esos espacios, con pastos altos. Después, salen a buscar comida a los alrededores. Hemos contabilizado 6.000 sitios baldíos en todo el departamento. Están llenos de roedores y de alimañas. 
- ¿Qué pasa con el vaciadero situado atrás del loteo El Bernel?
- En estos momentos, sólo se recibe basura verde. Pusimos una guardia en el ingreso, para que controles. Y estamos combatiendo, todos los días, los basureros clandestinos.
El hantavirus es una zoonosis transmitida por la saliva, la orina y la materia fecal de los roedores herbívoros silvestres. Estas secreciones se secan, se volatilizan e ingresan al organismo de los humanos a través de las mucosas. No se reportaron contagios entre humanos, ni tampoco de roedores hacia otros animales. Desde que se confirmaron dos casos fatales en la provincia - ambos ocurridos en Burruyacu- la inquietud se apoderó de los tucumanos. Precisamente, ante la letalidad de ese virus, el mensaje unánime que transmiten los expertos es que hay que evitar la presencia de roedores.

"Para combatir el antavirus, lo más importante es la higiene. En Yerba Buena hay roedores; eso exige un trabajo conjunto, que involucre a los vecinos y al municipio". Rodolfo Aranda, el director de la oficina de Saneamiento de esa Municipalidad, asegura que se han extremado las medidas de prevención, tras la confirmación de la enfermedad en Tucumán.

"Los negocios en los que se manipulan alimentos pueden atraer ratas. Hace unos días, hicimos unas inspecciones en las avenidas Solano Vera y Aconquija. ¿Sabe que el 30 % de los comercios ubicados allí estaba en situación irregular? Después, nos fuimos a  San José: la cifra llegó al 50 %. Son un montón los locales que no se encuentran registrados. En todo 2014, se libraron 650 actas. Hasta octubre del año pasado, se hicieron casi 700. Desde que asumimos en el gobierno municipal, en cambio, ya hicimos 500 multas", añade el funcionario. 


- ¿Cuál es la política con respecto a los terrenos abandonados?

- Hace poco fuimos a inspeccionar un supermercado. Y vimos que el problema no estaba dentro, sino afuera. Hay muchos sitios baldíos alrededor de ese comercio, por ejemplo. Y las ratas se refugian en esos espacios, con pastos altos. Después, salen a buscar comida a los alrededores. Hemos contabilizado 6.000 sitios baldíos en todo el departamento. Están llenos de roedores y de alimañas. 


- ¿Qué pasa con el vaciadero situado atrás del loteo El Bernel?

- En estos momentos, sólo se recibe basura verde. Pusimos una guardia en el ingreso, para que controles. Y estamos combatiendo, todos los días, los basureros clandestinos.


El hantavirus es una zoonosis transmitida por la saliva, la orina y la materia fecal de los roedores herbívoros silvestres. Estas secreciones se secan, se volatilizan e ingresan al organismo de los humanos a través de las mucosas. No se reportaron contagios entre humanos, ni tampoco de roedores hacia otros animales. Desde que se confirmaron dos casos fatales en la provincia - ambos ocurridos en Burruyacu- la inquietud se apoderó de los tucumanos. Precisamente, ante la letalidad de ese virus, el mensaje unánime que transmiten los expertos es que hay que evitar la presencia de roedores.